miércoles, 27 de abril de 2011

Miedo

Un miedo terrible de cruzar el puente.
Miedo. Un terror sordo e implacable, paralizante.
Pero no, nunca lo suficientemente intenso y devorador para matar el deseo de encontrar el otro lado.
¿Qué habrá allí? Quizás no haya nada, absolutamente nada. Pero aun así...
Si al menos el puente desapareciera, quedaría liberada, libre; libre de la decisión.
Cruzar o no cruzar, siempre. Un paso, sólo un pequeño e ¿inofensivo? paso.
Pero no.
Mis pies son de plomo, su peso llega hasta mi corazón.
Tengo poca fe.
¡Maldición!
¡Es peligroso cruzar un puente hecho de deseos!

1 comentario:

  1. Hermosa expresión sobre un obstaculo indeseable que a muchos afecta, ¿me parece o Jadis a encontrado sus viejos papeles? si es asi, brindo por ello...(una de las conciencias en fuga)...

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